Cuando se consume un producto de Comercio Justo, se paga un salario digno a los productores, se lucha contra la explotación infantil, y se promueve la igualdad entre hombres y mujeres, respetando el medio ambiente y los derechos laborales”, afirma.

Galofré opina que el origen de las grandes desigualdades entre el Sur y el Norte está en las relaciones comerciales: “La reforma del comercio mundial es un requisito imprescindible para acabar con las profundas injusticias sociales que acompañan a la globalización”.

“Creemos que el comercio internacional bien gestionado tiene el poder de librar a millones de personas de la pobreza. Tan solo si África, Asia oriental, Asia meridional y Latinoamérica aumentaran su cuota de exportaciones mundiales en un 1%, los beneficios generados supondrían cinco veces la cantidad que reciben en concepto de ayuda y sacarían de la miseria a 128 millones de personas. Para acabar con la pobreza lo que realmente se necesita es construir un nuevo orden comercial mundial basado en el compromiso de que la globalización sirva para paliar los desequilibrios sociales y económicos y no para agravarlos”, expresa el Director del Departamento de Comercio Justo de Intermón Oxfam, Rafael Sanchís.

¿Son más caros estos productos? ¿Por qué?
“Algunos productos de Comercio Justo son más caros que los del comercio convencional y otros no, depende de los artículos. Esto se debe principalmente a que se paga un precio más elevado al productor. Por ejemplo, según las cotizaciones del café arábiga en septiembre de 1999, el Comercio Justo pagaba un 40% más que el comercio convencional. También porque las cantidades de café de Comercio Justo son muy pequeñas en comparación con la distribución convencional de alimentación, lo que encarece proporcionalmente los gastos de transporte y almacenaje”, explica Galofré.

Intermón Oxfam ha elaborado una comparativa* sobre los diferentes elementos que intervienen en el precio final de un paquete de café. “Creemos que ilustra perfectamente a qué se dedica la mayor parte del precio y por qué merece la pena que en ocasiones sea un poco más elevado”, señala el director Sanchís:

¿Puede perjudicar al comercio convencional?
“No. El movimiento del Comercio Justo lucha por cambiar las reglas y prácticas injustas del comercio internacional convencional. Pensamos que los consumidores y la ciudadanía son un eslabón fundamental en la cadena de Comercio Justo por varias razones. Pueden influir en las estructuras comerciales tradicionales que marginan a los productores del Sur, pueden formar parte del último eslabón de la cadena solidaria al utilizar con responsabilidad su poder de compra, y pueden exigir a las empresas que los productos se elaboren de una manera justa y responsable”, afirma Guillem Galofré.

¿Dónde se pueden encontrar productos de Comercio Justo?
“Pueden encontrarse productos de Comercio Justo (alimentos, textiles, artesanía, muebles de madera, juguetes y material de papelería) en las tiendas específicas de organizaciones de Comercio Justo, en tiendas solidarias y en cadenas de supermercados. Intermón Oxfam distribuye productos de alimentación a los supermercados Eroski, Bonpreu, Condis, Mercat, Consum, Alcampo, Carrefour, Sorli, Ercoreca, Escale, Inpescasa, Sabeco, Intermarche y Leclerc”, indica Sanchís.

Fuentes de Carrefour confirman que la compañía comercializa dos productos de Comercio Justo: café de Colombia y cacao soluble de Paraguay y Republica Dominicana. “El principal objetivo de la compañía con estos productos es contribuir al desarrollo del comercio responsable. Muchos de nuestros clientes comparten este mismo objetivo y, por lo tanto, consumen este tipo de artículos. La introducción de estos productos responde a la voluntad de Carrefour de atender a la demanda creciente de un consumidor cada vez más sensible a los problemas de su entorno”.